Cuando el verano se pone en marcha, las altas temperaturas nos hacen desear un respiro. Y aunque encender el aire acondicionado puede ofrecer un alivio inmediato en un caluroso día de verano (si es que tienes suerte de tenerlo), hacerlo funcionar durante largos periodos de tiempo aumentará inevitablemente tus facturas de energía. Por suerte, hay algunas opciones alternativas para mantener tu casa fresca sin recurrir al aire acondicionado. A continuación, te presentamos 4 formas de bajo consumo para amortiguar tu casa del calor abrasador.
1. ¡Empieza a plantar!
¿Sabías que el follaje de alta densidad es una forma natural y hermosa de proporcionar sombra en el exterior para que puedas estar más fresco en el interior? Pon en práctica tu habilidad para la jardinería y evita que el calor del verano irradie hacia tu casa plantando árboles y arbustos altos frente a las paredes o ventanas que reciben la luz directa del sol. Las enredaderas y los enrejados también ayudan a proteger su casa de las altas temperaturas y pueden mejorar el aspecto de su patio. La elección de árboles conocidos por sus características de sombra en verano -y su plantación estratégica alrededor de la casa- es clave, sobre todo si están orientados hacia las ventanas acristaladas. Como los árboles plantados demasiado cerca de su casa pueden ser un peligro de incendio o pueden causar problemas de cimentación, asegúrese de hablar con un experto en jardinería para encontrar la mejor solución para su casa durante todo el año.
2. Ventilar con ventiladores de techo y de torre
Si le preocupa la energía, los ventiladores de techo y los de torre son una gran opción. Un simple ventilador de techo ofrece una gratificación instantánea en una habitación sofocante, haciéndola sentir más fresca incluso cuando la temperatura en sí no ha cambiado. Mientras que un aparato de aire acondicionado puede consumir miles de vatios de energía cuando se utiliza, el ventilador de techo medio sólo consume 60 vatios, incluso cuando funciona todo el día. Sin embargo, hay un truco a tener en cuenta con los ventiladores de techo. Durante los calurosos meses de verano, asegúrese de ajustar la configuración de rotación para que las aspas del ventilador giren en sentido contrario a las agujas del reloj. Esto promoverá un mayor flujo de aire y mantendrá el aire fresco circulando por toda la habitación, extrayendo el aire caliente del suelo, enfriándolo y volviéndolo a soplar hacia abajo. Incluso puede colocar varios ventiladores por la habitación para crear túneles de aire fresco.
3. Cierre las ventanas, cortinas y persianas
Cuando suben las temperaturas del verano, su primer instinto puede ser abrir las ventanas para que circule el aire. Sin embargo, abrir las ventanas en un día caluroso y húmedo de verano no es recomendable: sólo hará que tu casa se caliente, no que se enfríe.
Se calcula que alrededor del 30% del calor no deseado entra por las ventanas. A medida que sube el mercurio, el uso inteligente de persianas, cortinas opacas, mosquiteras que reflejan la luz y otros tratamientos para las ventanas puede reducir la cantidad de calor no deseado que entra en su casa, manteniendo así su casa más fresca y sus facturas de servicios públicos bajo control. Cuando se instalan correctamente, las persianas o cortinas de colores claros actúan como bloqueadores del calor y evitan que su casa se sienta como un invernadero humeante.
4. Instale toldos exteriores
Aunque cerrar las persianas y las cortinas puede ayudar a controlar la luz del sol y la ganancia de calor, los sistemas de sombreado exterior pueden ser mucho más eficaces para mantener su casa fresca. ¿Por qué? Porque bloquean la luz solar y los rayos UV antes de que lleguen a las paredes y penetren en las ventanas.
Las ventanas suelen ocupar entre el 15 y el 20 % de la superficie de las paredes, por lo que proteger su casa con toldos para ventanas es una solución de ahorro energético de primer orden para controlar el calor solar del exterior.
Además, los toldos retráctiles de TOLDOS ROAMA son una forma asequible y sin complicaciones de reducir los costes de climatización de su casa y el consumo total de energía durante todo el año. Los toldos o las pérgolas retráctiles colocados sobre las ventanas o las puertas de cristal del patio en verano pueden bloquear los dañinos rayos UV y reducir la transferencia de calor al interior de la vivienda en un 77% (especialmente cuando se instalan en ventanas orientadas al sur o al oeste), lo que los convierte en una solución rentable a largo plazo. Además, los toldos de exterior son una solución rápida y sencilla y tienen las ventajas añadidas de la flexibilidad, la versatilidad y el estilo, además de proteger los muebles de interior, las alfombras y el suelo contra la decoloración.
Conclusión
En lugar de gastar energía (y dinero) para refrescar su casa, ¿por qué no mantener el calor fuera en primer lugar? Si elige la opción más adecuada para su casa, evitará que el calor solar penetre en su propiedad durante el verano, ayudará a mantener su casa más fresca y reducirá su consumo energético total. ¿No es genial?